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Ingredientes (para dos copas):
• 250 g de fresas
• 2 cucharas soperas de azúcar
• el zumo de medio limón
Crema:
• 100 g de queso mascarpone (a temperatura ambiente)
• 50 g de chocolate negro
• almendras laminadas para decorar
Modo de preparación:
La receta original la vi en L' Exquisit.
Ahora que estamos en plena temporada de fresas os traigo una receta para chuparse los dedos. Reconozco que no pertenece a la categoría especialmente light, pero quién no merece de vez en cuando un capricho. Sin esos pequeños placeres la vida es muy sosa. ¿A que tengo razón? Pues voy a compartir con vosotr@s el secreto de esta receta sencilla pero exquisita.
Ingredientes (para dos copas):
• 250 g de fresas
• 2 cucharas soperas de azúcar
• el zumo de medio limón
Crema:
• 100 g de queso mascarpone (a temperatura ambiente)
• 50 g de chocolate negro
• almendras laminadas para decorar
Modo de preparación:
Limpiamos las fresas, les quitamos el pedúnculo y las cortamos a lo largo en cuartos. Las ponemos en un bol, espolvoreamos con el azúcar y añadimos el zumo de limón. Mezclamos bien y las dejamos macerar en la nevera durante una noche. (Si no disponéis de tanto tiempo, dejadlas por lo menos tres horas como mínimo.)
El día siguiente ponemos a derretir el chocolate al baño María. Mientras, con unas varillas eléctricas batimos un poco el queso mascarpone, simplemente para que no esté tan compacto y por otro lado tostamos ligeramente las almendras laminadas en una sartén. Cuando el chocolate está fundido lo mezclamos (con una cuchara) con el queso, pero no demasiado, ya que debe quedar un efecto marmolado.
Finalmente repartimos las fresas en las copas, cubrimos con la crema y decoramos con unos trozos de fresa y con láminas de almendras. Listo. ¡Podemos empezar a gozar!
(Tengo otra receta de fresas que sencillamente quita el sentío’... ¡os la debo!)
La receta original la vi en L' Exquisit.
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