ESPAGUETIS CON ALMEJAS

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Voy a arrancar mi blog con este plato sencillo pero estupendo, que podría denominar también como el “matrimonio perfecto”. Pocos ingredientes, poco engorro, disfrute garantizado.

Ahí va:

Ingredientes (para 2 personas):

• ½ kilo de almejas (si son de carril, mejor)
• 200 g de espaguetis
• 6-8 dientes de ajo
• 1 o 2 guindillas (a gusto de cada uno)
• perejil
• vino blanco seco de buena calidad (150 ml)
• sal
• aceite de oliva
• zumo de limón

Las almejas las enjuagamos y las dejamos un buen rato en agua con sal, para que expulsen la arenilla. Si se quedan en el agua de un día para otro mejor, pero entonces hay que meterlas en el frigorífico. Es un paso muy importante porque masticar arena es muy desagradable y puede estropear este plato exquisito.

Ponemos los espaguetis a cocer en agua hirviendo con sal, respetando el tiempo que indica el fabricante. Mientras ponemos una sartén con aceite de oliva y echamos el ajo fileteado, la guindilla machacada y un poco de sal. Cuando el ajo está ligeramente dorado, echamos el vino. Hasta que arranca el hervor, sacamos las almejas del agua y las enjuagamos. (Se suele ver en el agua de las almejas la arenilla y demás suciedad.) A continuación las echamos a la sartén. Yo las suelo sacar con una pinza conforme se van abriendo, porque no me gustan demasiado hechas. Les echamos por encima un poco de zumo de limón. Dejamos reducir un poco el vino y probamos los espaguetis. Si están “al dente” los colamos, los ponemos debajo del chorro de agua fría, y los dejamos escurrir. Picamos el perejil, y si la “salsa” ha reducido lo suficiente, entonces podemos echar a la sartén las almejas, los espaguetis y el perejil. Lo removemos todo bien y cuando está bien caliente, se puede servir.

¡Echar queso a este plato es pecado mortal!... por muy “parmigiano” que sea.