Ez a recept megtalálható magyarul itt.
Después de tantos días de fiesta una ya tiene ganas de volver a la normalidad en todos los sentidos, en todos los ámbitos, pero sobre todo en la cocina. Yo empecé....nooo....no con un régimen nuevo, ni siquiera con uno viejo. Gracias a Dios no suelo pasarme con la comida preparando platos y platos que luego se necesita una semana para acabar con las sobras. No. Intento hacer cantidades justas que se puedan comer cómodamente sin hincharse.
Después de tantos días de fiesta una ya tiene ganas de volver a la normalidad en todos los sentidos, en todos los ámbitos, pero sobre todo en la cocina. Yo empecé....nooo....no con un régimen nuevo, ni siquiera con uno viejo. Gracias a Dios no suelo pasarme con la comida preparando platos y platos que luego se necesita una semana para acabar con las sobras. No. Intento hacer cantidades justas que se puedan comer cómodamente sin hincharse.
Pero aún así empecé por aprovechar
las sobras que me quedaban de algunos ingredientes. Sacando de la nevera unas mitades de pimientos se me ocurrió la
idea de hacer un ragú de mejillones con pimientos. Así que compré poco más de
medio kilo (aprox. 15-20 unidades) de mejillones y me puse a ello.
Ingredientes (para 2 personas):
· 160 g de pasta fusilli bucati (o cualquier otra pasta a gusto)
· 15-20 mejillones
· medio pimiento california rojo
· medio pimiento california amarillo
· una cebolla pequeña
· 2 dientes de ajo
· la mitad de un chile fresco (opcional)
· 3 tomates grandes (se pueden sustituir por puré de tomate natural)
· sal, pimienta
· aceite de oliva
· un manojo pequeño de perejil fresco
· queso parmesano
Antes de empezar cualquier cosa primero hay que
limpiar bien los mejillones de barbas y demás cosas, lavarlos y ponerlos en remojo en agua
fría y salada durante unas 2-3 horas. Pasado este tiempo ponemos a calentar una
sartén seca y echamos los mejillones. Tapamos y esperamos a que se vayan
abriendo al vapor y los vamos sacando conforme se vayan abriendo. Cuando estén
todos, los sacamos de la concha y reservamos. Cortamos la cebolla en juliana y
la ponemos a pochar en aceite de oliva. Limpiamos los pimientos, también los cortamos
en tiras y añadimos a la cebolla. Mientras se va haciendo el sofrito ponemos a
calentar agua para la pasta y pelamos/picamos los tomates. Después de 8-10
minutos echamos el chile y los ajos picados al sofrito, le damos unas vueltas e
incorporamos el tomate. Salpimentamos. Echamos sal al agua que ya esté
hirviendo y ponemos a cocer la pasta. Calculemos que la pasta y el ragú estén listos más o menos al mismo tiempo. Cuando se evaporó parte del
líquido del tomate (digamos que el ragú está a punto) añadimos los mejillones.
Echamos el perejil y la pasta escurrida, le damos unas vueltas y servimos. Ya
en el plato espolvoreamos con un poquito de perejil picado y queso parmesano y
listo. ¡Que aproveche!
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